Una misma mirada.

    Una de las problemáticas y tema que hasta el día de hoy es centro de múltiples debates es la inclusión y diversidad dentro del aula. En relación a la inclusión podemos decir que se ha avanzado bastante en relación a los antiguos estándares sociales que hemos visto a lo largo de nuestra educación formal. Actualmente nos  encontramos con  niños mucho más conscientes y reflexivos respecto a las diferencias, capaces de ponerse en el lugar del otro y entender que todos tienen la libertad de expresar sus emociones, conocimientos e ideas, con igual  derecho de ser escuchados y guiados por su docente Sin embargo,si bien hay avances aún no es tema resuelto y todavía continúa siendo un gran desafío para la institución,  garantizar y ofrecer con la igualdad de oportunidades en un clima de compañerismo y solidaridad. 

 De igual modo los docentes ya no solo se preocupan por saber si el conocimiento dado ha sido capaz de llegar a los sujetos, también se encargan de descubrir la forma en la que ellos aprenden, la manera en la que puedan mejorar cada una de sus capacidades, planifica de acuerdo a los intereses y ritmos de trabajo, promueven un ambiente seguro y respetuoso, donde los niños se sientan valorados, escuchados y aceptados, para que logren ser protagonistas activos de sus propios  procesos de aprendizaje.

    Es necesario trabajar en generar entornos educativos en los que se valore y respete la diversidad, viéndola como una oportunidad para proporcionar respuestas adecuadas a cada estudiante desde un ambiente en el que se fomenten trabajos colaborativos, recreativos, participativos y reflexivos. 

    Podemos agregar también que este entorno no es algo que se da espontáneamente, los aportes tanto del estudiante como del docente sostendrán su desarrollo. Para ello debemos comprender que el estudiante será el principal centro del proceso de enseñanza-aprendizaje, el cual debe estar orientado a satisfacer las necesidades de cada uno de los sujetos y fomentar su desarrollo cognitivo, emocional y social. En un principio lo más adecuado sería conocer los diferentes estilos de aprendizaje de los alumnos, y ofrecer diversos recursos o consignas de trabajo que permitan a cada uno expresarse, adaptarse y desplegarse de manera propia, analizando la forma en la que trabajan individualmente como en grupo, remarcando cuáles son sus  habilidades y debilidades a mejorar o desarrollar.

    En el siguiente video se podrán observar y reflejar algunos pensamientos de estudiantes que podemos relacionarlo acerca del qué pasaría si no originamos un entorno educativo acorde a las ideas de ellos mismos, en el que se logre reflejar el sentimiento de seguir aprendiendo, trabajando y creciendo.

    Como pudimos ver en el video, gran parte lo estudiantes se siente  agobiados y  restringidos en la manera de pensar , es por ello que debemos generar un entorno innovador y acorde a sus necesidades.